SELLO | CIPRÉS DE LA ANUNCIADA

CIPRÉS DE LA ANUNCIADA

DATOS TÉCNICOS DEL SELLO

Número EDIFIL: 4221


Temática: Árboles monumentales

Fecha de puesta en circulación: 31 de enero de 2006

Procedimiento de impresión: Huecograbado

Papel: Estucado, engomado, fosforescente

Dentado: 13 3/4

Formato de lo sello: 28,8 x 40,9 mm (vertical)

Efectos en pliego: 50

Valor postal: 0,53 €

Tirada: 1.000.000

INFORMACIÓN SOBRE EL MOTIVO DEL SELLO

Tras las emisiones aparecidas sobre la encina La Terrona de Zarza de Montánchez, en Cáceres, y el ahuehuete del parque madrileño del Retiro, ambos catalogados como Árboles Monumentales, se enriquece la serie con un nuevo sello dedicado a otro hermoso ejemplar: el ciprés conocido como de la Anunciada, ubicado en el convento que le da nombre, en Villafranca del Bierzo, en León. La aparición del sello coincide con el cuarto centenario de este árbol emblemático. El ciprés de la Anunciada se localiza en terrenos del monasterio de la Orden de Santa Clara, ha sido testigo de los aconteceres históricos del lugar casi desde que fuera fundado en 1606 por don Pedro de Toledo, quinto marqués de Villafranca y virrey de Nápoles. En dicho convento ingresó su hija doña María de Toledo, a quien la tradición oral señala como autora de su plantación. El ciprés tiene la misión de servir de hito en el paisaje pues permite la fácil localización del monasterio. De ahí que esté situado en la parte alta de su huerta. El árbol es un claro referente cultural, tanto para los vecinos del Bierzo como para los que utilicen la ruta Jacobea. Sus medidas están en torno a 40 metros de altura y su tronco posee alrededor de 1,55 m. de diámetro. Es, por tanto, uno de los árboles de mayor altura de los del territorio español, lo que ha dado lugar a su bien merecido calificativo de Árbol monumental. En cuanto a su conservación, el ciprés de la Anunciada, en estas últimas décadas, se ve aquejado de diversos males debido a la presencia de hongos, de insectos patógenos y a la rotura de ejes secundarios y terciarios. En parte estos males se están solventando con el empleo de tratamientos fitosanitarios para atacar las plagas. Esta medida de conservación viene a mejorar las condiciones de vida de este hermoso ejemplar y a renovar su pervivencia, gracias a la actuación conjunta de varias instituciones que cuentan con el asesoramiento de expertos de prestigio.


Texto: Francisco Vicent Galdón