SELLO | CITRÖEN C-11, RENAULT DAUPHINE, SEAT 600 Y SIMCA 1000

CITRÖEN C-11, RENAULT DAUPHINE, SEAT 600 Y SIMCA 1000

DATOS TÉCNICOS DEL SELLO

Número EDIFIL: 4725


Temática: Vehículos de época

Fecha de puesta en circulación: 30 de mayo de 2012

Procedimiento de impresión: Offset

Papel: Estucado, engomado, fosforescente

Dentado: 13 ¾ (horizontales)

Formato de los sellos: 40,9 x 28,8 mm (horizontales)

Formato de la hoja bloque: 105,6 x 79,2 mm (horizontal)

Valor postal: 0,85 €

Tirada: 280.000 Hojas bloque

INFORMACIÓN SOBRE EL MOTIVO DEL SELLO

Bajo el titular Coches de época se pone en circulación una hoja bloque, con cuatro sellos, que reproduce alguno de los vehículos más populares y que más han contribuido al desarrollo de la industria automovilista española.

En 1934 se presentó en el Salón del Automóvil de París el Citroën C-11, un nuevo modelo de coche que, junto al Citroën C-7, incorporaba por primera vez la Traction Avant o tracción delantera. Se consideró un vehículo muy avanzado para la época, ya que fue el primer automóvil de serie fabricado en carrocería autoportante, en la que el chasis y la propia carrocería formaban una unidad inseparable. Durante la Segunda Guerra Mundial se interrumpió la fabricación y regresó al mercado en 1946. En julio de 1957 cesó la producción de este modelo. La marca francesa se instaló en España, en 1957, con la denominación Citroën Hispania.

El Renault Dauphine se presentó con gran espectacularidad en los países europeos en 1956, alcanzando un éxito inmediato. De línea elegante, espacioso y con cuatro puertas, se creó especialmente para uso familiar. Tenía motor trasero y podía alcanzar hasta 117 Km/h. Se le achacó falta de estabilidad. En España, entre 1958 y 1967, se fabricaron en la FASA-Renault de Valladolid más de 125.000 vehículos en las tres versiones existentes: Dauphine, Ondine y Gordini.

El coche más popular de la década de 1960 fue, sin duda, el SEAT 600; un utilitario que marcó un hito en la historia del automóvil en España. Concebido para la clase media que empezaba a emerger, su fabricación comenzó en junio de 1957 y finalizó en 1973. El 600, seílla o seíta, como se le solía denominar, supuso el inició de la motorización masiva y un símbolo de libertad. Disponía de dos puertas y tracción trasera y el único problema que presentó fue la refrigeración que, según su inventor, el italiano Dante Giacosa, se solucionaba con que estuviera bien tensa la correa del ventilador. En nuestro país se fabricaron un total de 799.419 unidades.

El Simca 1000 se presentó en Paris en 1961. Su diseño se basó en el estilo imperante de la época: con motor y propulsión trasera, cuatro puertas y cuatro asientos que permitían desplazar a cinco personas. El exterior tenía unas proporciones equilibradas, a modo de una pequeña berlina con tres cuerpos que le hizo muy atractivo para el gran público. La estrategia comercial se dirigió hacia un mercado familiar de mediados de los años sesenta y principios de los setenta. En España lo fabricó la Empresa Barreiros y de su factoría de Villaverde salieron 205.429 vehículos.