DATOS TÉCNICOS DEL SELLO
Número EDIFIL: 4994
Temática: Denominaciones de origen protegidas
Fecha de puesta en circulación: 25 de septiembre de 2015
Temática: Denominaciones de origen protegidas
Fecha de puesta en circulación: 25 de septiembre de 2015
Procedimiento de impresión: Offset
Papel: Estucado, engomado, fosforescente
Formato de los sellos: 40,9 x 28,8 mm (horizontales)
Dentado: 14 2/11(horizontal) y 13 8/9 (vertical)
Formato de la hoja bloque: 133 x 99 mm (horizontal)
Valor postal: 1 €
Tirada: 220.000 hojas bloque
Diseño: Konecta BTB, S.L.
INFORMACIÓN SOBRE EL MOTIVO DEL SELLO
Se inicia una nueva temática dedicada a las Denominaciones de Origen Protegidas (DOP) que difunde aquellos productos que cuentan con esa nominación. La emisión tendrá continuidad en los próximos años y, en esta ocasión, está dedicada a Galicia y al “Pimiento de Padrón” y el “Mejillón de Galicia”. Ambos productos se reproducen en la hoja bloque y en los dos sellos que la forman.
“Unos pican y otros no”, dicen de los conocidos Pimientos de Padrón. Todo depende de la cantidad de capsicina que contengan, que es el componente que aporta más picante. Este pequeño fruto de color verde fue reconocido con la Denominación de Origen Protegida el 1 de julio de 2009 como Pimiento de Padrón. Su producción se limita a un área de la vertiente atlántica que comprende un conjunto de valles de reducida altitud, delimitados por los Ulla Y Sar, y protegidos por varias sierras que aíslan la zona y proporcionan el clima adecuado para el cultivo. Esta variedad de pimiento fue introducida por los monjes franciscanos del convento de San Antonio de Herbón, del Ayuntamiento de Padrón, en el siglo XVII, quienes trajeron las semillas desde el estado mexicano de Tabasco e iniciaron su cultivo.
El Mejillón de Galicia, rico en minerales (hierro, fosfato y zinc) y en vitaminas, es un molusco de apreciado sabor gastronómico que admite múltiples recetas. El Consejo Regulador del Mejillón de Galicia inició sus actividades en 1994 con el fin de fomentar la calidad de este producto tan reconocido hoy en día. Por su situación geográfica, las rías gallegas constituyen un entrono especial para la cría del mejillón, ya que concentran una importante fuente de nutrientes propiciada por la confluencia de las corrientes oceánicas y fluviales. El cultivo del molusco se hace en bateas y, prácticamente, la mayoría de los productores y de las empresas que comercializan el mejillón, tanto fresco como transformado, se encuentra adheridas a la Denominación de origen.
En 1945 se fondeó la primera batea en la ría de Arousa. Unos años más tarde se convirtió en un cultivo de gran desarrollo en el mundo de la acuicultura, siendo uno de los recursos económicos más importantes para los pueblos de la zona.