Número EDIFIL: 4580
Temática: Catedrales
Fecha de puesta en circulación: 15 de julio de 2010
Procedimiento de impresión: Calcografía y offset
Papel: Estucado, engomado, mate, fosforescente
Dentado: 13 3/4
Formato del sello: 28,8 x 40,9 mm (vertical)
Formato de la hoja bloque: 105,6 x 79,2 mm (vertical)
Valor postal: 2,75 €
Tirada: 300.000 hojas bloque
INFORMACIÓN SOBRE EL MOTIVO DEL SELLO
La catedral de Segovia fue iniciada en 1525 según trazas de Juan Gil de Hontañón, durante el reinado de Carlos V, sobre el solar de la anterior, destruida en 1520 durante la guerra de las Comunidades. Es de estilo gótico tardío y en su construcción intervinieron también: Rodrigo, hijo del anterior Gil de Hontañón, que diseñó el crucero y la cabecera, y Juan de Guas, que intervino en el claustro. La planta y construcción de éste grandioso templo es la tradicional y consta de tres naves y capillas ubicadas entre los contrafuertes, las que se cierran con rejas de hierro forjado de gran belleza y valor artístico. Posee la Catedral en el crucero una gran cúpula y su cabecera con girola y siete capillas poligonales. Su aspecto externo es de una notable belleza y monumentalidad que se ve realzada por sus pináculos, arbotantes y majestuosa torre que mide cerca de 90 metros, los que forman un conjunto impresionante que envuelve el abovedado interior, ligero y elegante.
Cuenta la Catedral con un valioso patrimonio artístico, consistente en vidrieras, en rejas de excelente factura y en una sillería del coro, de gótico flamígero, flanqueada por dos órganos barrocos y un retablo de la Piedad de Juan de Juni. Tiene, además del Altar Mayor, obra de Francisco Sabatini, espléndidas capillas como las del Santísimo Sacramento que cuenta con un valioso retablo de José de Churriguera; la capilla del Descendimiento, de la que destaca un Cristo yacente de Gregorio Fernández; la de San Andrés, donde hay un tríptico flamenco, obra de Ambrosio Benson; la de Santiago, con un retablo barroco de Pedro de Bolduque, donde hay pinturas atribuidas a Sánchez Coello y de Alonso de Herrera; la de San Antón que conserva un retablo barroco de Vallejo Vivanco, una talla del santo que es obra de Pedro Valle, y pinturas de Francisco Herranz. Hay además otras capillas dedicadas a la Piedad, San Cosme y San Damián, San Gregorio, la Concepción, San Blas, el Cristo yacente y Santa Bárbara. A ellas se suman obras importantes de Berruguete, Van Orley y Sánchez Coello guardadas en el Museo Catedralicio.