Número EDIFIL: 4690
Temática: Turismo
Fecha de puesta en circulación: 28 de febrero de 2012
Procedimiento de impresión: Offset
Papel: Autoadhesivo fosforescente
Formato de sellos: 40,9 x 28,8 mm (horizontal)
Efectos pliego: 25
Valor postal: 0,70 €
Tirada: Ilimitada
INFORMACIÓN SOBRE EL MOTIVO DEL SELLO
Se pone en circulación un nuevo sello dedicado al Turismo que pone de relieve la importancia que este sector tiene tanto para el propio ser humano como para el desarrollo económico y social de un país.
El interés por conocer otros lugares, territorios y regiones, el deseo de descubrir nuevas culturas y formas de vida, así como de descansar y disfrutar de los períodos vacacionales, rompiendo con la rutina diaria, son algunas de las motivaciones que nos inducen a practicar el turismo de forma generalizada.
Ya en la época de los romanos, los lugares de veraneo y las villas residenciales se convirtieron en espacios de descanso y placer para las clases altas y privilegiadas que podían disfrutar de ellos. Desde entonces, el concepto del turismo ha variado considerablemente hasta convertirse en una práctica social y expansiva accesible para todos.
El fenómeno de turismo nace realmente a mediados del siglo XIX, cuando el ferrocarril hace su aparición y se organizan, por primera vez, itinerarios de viajes por distintas zonas del mundo. A finales del mismo siglo, se comienza a promocionar, también, el turismo de las aguas termales con estancia en los balnearios, y los más osados se aventuran a recorres lugares remotos de África y Asia no exentos de peligro.
Un siglo más tarde, con la organización de los vuelo charter se da un impulso decisivo a la expansión e internacionalización del turismo de masas, siendo en la década de 1960 cuando se producen los grandes flujos turísticos que no han dejado de crecer.
Hoy día, el turismo se ha convertido en una actividad económica que juega un papel importante en la balanza de pagos y en la creación de multitud de puestos de trabajo relacionados y derivados de este sector. El desarrollo de la artesanía tradicional, la conservación de los espacios naturales artísticos y naturales, la preservación de la gastronomía típica de cada país y región, y el mantenimiento de las fiestas y tradiciones declaradas de interés hacen que el turismo ofrezca un abanico de posibilidades para todos los gustos.
El sello, con un valor facial de 0,70 euros, plasma la idea del turismo a través de un sol brillante que despide luz sobre las zonas peninsulares e insulares de España y sobre las aguas azuladas que bordean sus costas.